Otro posible título para este post hubiera sido perfectamente
"Crónica de una muerte anunciada", pero no me quiero poner tremendista.
Desde que el pasado jueves saltó el rumor sobre
Fundación Hospital Calahorra, y empezar a salir noticias, mucho se ha dicho y mucho se seguirá diciendo, de unos y de otros, por parte de la Consejería, y por parte del Comité de Empresa, por parte de políticos de un lado, y por parte de los del otro.
Y en vista de los
DM y whatsapps que me han llegado por parte de algunos amigos y algún que otro curioso preguntándome al respecto, creo que es conveniente dejar aquí escrito,
negro sobre blanco, lo que yo pienso del tema.
Jueves, 27 de septiembre: me llega el rumor de que un
grupo privado que ya trabaja en
La Rioja, léase
VIAMED, podría comprar el hospital. Lo más curioso es que me llega el rumor desde dentro del hospital y desde fuera, es más, que casi casi soy el último en enterarme, que ya lo saben muchos trabajadores del hospital, y gente de la zona que nada tiene que ver con la Sanidad.
Viernes, 28 de septiembre: estalla la burbuja informativa. Reunión de la Dirección con los mandos intermedios, reunión de la Dirección con el Comité de Empresa, ruedas de prensa de
unos y
otros, y a correr ríos de tinta.
¿Estamos en peligro de desaparecer o estamos ante el final del modelo de las Fundaciones Públicas sanitarias?
¿Por qué, si se viene hablando de todo esto desde el mes de julio, no es hasta el jueves que se precipitan los hechos? Se han modificado los estatutos del hospital para permitir que sea una persona jurídica y no sólo una persona física, la que lleve la dirección del mismo. Esto no se hace de la noche a la mañana, esto entiendo que lleva un tiempo pertrechándose en la sombra, a día de hoy hay un patronato que gestiona la FHC,
patronato que integran entre otros, los alcaldes de la zona ¿por qué se quejan ahora? ¿Porqué la opinión pública se les puede echar encima y prefieren hacerse los ofendidos o negar la mayor y decir que sólo se está estudiando?
¿Por qué de repente el Comité de Empresa sale de su letargo? Y que conste que me alegro, que han hecho lo que tenían que hacer, dar la cara y pedir explicaciones, pero ¿por qué ahora? ¿No será ya un poco tarde? ¿Dónde han estado metidos los últimos meses, muchos meses ya, en los que no se les ha oído decir "esta boca es mía"?
No sé dan cuenta que la excusa de que "haber presentado formalmente, por escrito y a través del registro de entrada, hace ya mas de dos meses, una solicitud de reunión a la Dirección de FHC de la que, según dicen, aun no han obtenido respuesta alguna" se les está quedando obsoleta, que ya la han usado más veces, y que eso al trabajador de a pié, al que se le está poniendo el futuro cada vez más negro, ya no le vale.
Por eso, y aunque tengo, tuve y tendré, buenas relaciones con algunos miembros de la Dirección y con algunos miembros del Comité de Empresa; muchos son ya los silencios de unos y de otros: con lo del 5%, con lo de la paga extra, con lo del incremento de jornada, con la no-negociación del convenio colectivo, cuya vigencia finalizó el pasado 31 de diciembre de 2011.
¿Es el final del modelo? ¿No funciona el modelo de Fundación?
Sinceramente, y por lo que he vivido durante estos diez años, creo que el modelo es bueno; y que los profesionales que en
FHC trabajan todavía mejores, entonces ¿qué ha pasado para llegar a esta situación?
Lo que no ha funcionado han sido las personas que han puesto a los mandos del modelo. Hay gestores que creen en el modelo, creen en el proyecto, creen en sus profesionales; y los motivan para que trabajen en y para la FHC.
Pero también hay gestores más tradicionales de la vieja escuela que no creen en las nuevas formas de gestión y/o no han sabido aprovechar las ventajas que ello les podía suponer.
Hay mejores gestores que otros, al igual que hay mejores profesionales que otros, unos que aprovechan las ventajas del modelo, otros que prefieren no tocar nada, que dejan hacer a sus mandos intermedios y, aunque no empujan, al menos no oponen resistencia, y otros gestores que siempre verán fantasmas por todos lados.
Lo intento explicar con un símil automovilístico a ver si me entienden:
FHC es un buen coche, pero todo depende del piloto que pongas a los mandos. Tenemos el gestor tipo
"Fernando Alonso" que pondrá siempre su coche en todos los rankings, está el gestor tipo
"Felipe Massa", que sí pero no, algún día de gloria dan pero también muchas penurias, pero luego están los gestores tipo
"Michael Schumacher", que están ya de vuelta de todo y en cualquier curva
te destrozan el coche.
¿Los que vengan, públicos o privados, vendrán a sacarle el mayor rendimiento al coche o vendrán a venderlo por piezas al desguace?
El tiempo lo dirá, lo que sí está claro es que venga quién venga, tiene que apretar muchas tuercas; y sí, no nos engañemos, habrá que tocar plantilla, habrá que tocar salarios, habrá que tocar políticas internas; pero espero que lo hagan buscando la máxima eficiencia de los recursos, que mientras sean públicos son de todos, y no sólo el recorte por recortar, que eso no nos va a llevar a ninguna parte.
NOTA: Éste que suscribe no tiene nada que ver con la Dirección ni con el Comité de Empresa de FHC, ni tiene nada que ver con grupo político alguno, ni de un lado, ni de otro. Éste que suscribe es simplemente un trabajador de
FHC desde hace ni más ni menos que diez años ya, y éstas son
mis opiniones de lo vivido, oído y sospechado durante todo este tiempo.